lunes, 9 de marzo de 2009

EL QUE CUENTA.


EL QUE CUENTA


No es el crítico quien cuenta,
ni el que señala con el dedo
al hombre fuerte
en el momento que tropieza,
o el que indica en qué cuestiones
el que hace las cosas
hubiera podido hacerlas mejor.


El mérito recae exclusivamente
en el hombre que se halla en la arena,
aquel cuyo rostro está manchado
de polvo, sudor y sangre,
el que lucha con valentía,
el que se equivoca
y falla el golpe una y otra vez,
porque no hay esfuerzo sin error
y sin limitaciones.


El que cuenta es
el que de hecho lucha
por llevar a cabo las acciones, el que conoce los grandes entusiasmos,
las grandes devociones,
el que agota sus fuerzas
en defensa de una causa noble,
el que, si tiene suerte,
saborea el triunfo de los grandes logros,
y si no la tiene y falla,
fracasa al menos habiéndose atrevido
al mayor riesgo,
de modo que nunca ocupará el lugar reservado
a esas almas frías y tímidas
que ignoran tanto la victoria como la derrota.


Theodore Roosevelt

1 comentario:

Herodoto dijo...

Aprender es equivocarse. Y para equivocarse es imprescindible actuar, tomar partido, intentarlo y tomar buena nota de los errores que se cometen...