Este pasado fin de semana, se celebró el 800 aniversario de la batalla de Las Navas de Tolosa.
Hasta allí se acercaron más de 300 recreadores y aficionados al mundo medieval, para representar la que fue la mayor confrontación bélica en la península Ibérica, entre tropas de los diferentes reinos cristianos y musulmanes.
Hasta allí se acercaron un par de miembros de Fidelis Regi, y si no hubiera sido por la distancia y otras obligaciones, alguno más hubieramos estado allí.
No entraré en el detalle, ya que lo desconozco, ni he hablado en demasía con nadie, ni he tenido la experiencia, pero por los comentarios que me han llegado y las fotografías que he podido ver, los participantes, volvieron con muy buen sabor de boca, a pesar de la paliza de kilómetros y el calor.
Desconozco los entresijos de la organización y si se cumplieron expectativas o no, pero el resultado tubo su repercusión mediática, tanto en prensa, como el algunas cadenas de televisión y se habló de recreación y recreacionistas. Y eso, sin duda, es bueno.
La representación aragonesa fue poca, siendo que Aragón es en buena parte cuna de algunos de los primeras asociaciones de recreación españoles. Quizás la distancia... no lo sé.
Sí que me gustaría que estas Navas de Tolosa y su recreación, no se quedaran ahí, sino que tuvieran continuidad, que no sea flor de un día y que el año que viene, las instituciones y administraciones; a pesar de que su aporte no sea para echar cohetes, no miren hacia otro lado, o lo que es peor, pongan trabas y problemas e imposibiliten que se siga celebrando esta recreación.
También me gustaría que cada año haya más presencia de recreadores, y que sea uno de los grandes eventos de recreación, junto al de otras reuniones que ya existen. Y que tenga un compromiso firme para que sea la calidad, en lo que a recreación se refiere, la que indique la línea a seguir y la que marque los ejes de mejora.
Nace un nuevo hito, con muy buena base y una enorme capacidad de recorrido, aportemos todos un granito de arena, limemos lo que haya podido mejorarse y ampliemos los aciertos, de esa manera la recreación medieval, seguirá creciendo, y con ellas todos los que de un modo u otro nos indentificamos o participamos en ella.
Que sea un catalizador que ayude a poner en valor otros encuentro y otros lugares, que nos haga partícipes de una afición común, y que el nivel de calidad que se vaya obteniendo sea un escalón que nunca se vuelva a bajar, sólo hay un recorrido, a seguir subiendo.
Una de esas reseñas en prensa:
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